¿Qué implica?
Realzar palabras y expresiones con la voz para que los oyentes capten fácilmente las ideas principales. El énfasis adecuado puede lograrse de diversas formas: elevando el volumen, disminuyendo el ritmo, introduciendo pausas, usando gestos o cambiando la expresión facial.
¿Por qué es importante?
El énfasis adecuado ayuda a mantener la atención del público, lo convence y lo motiva, haciendo que el mensaje sea más efectivo.
Cómo emplear el énfasis correctamente
El uso del énfasis no consiste simplemente en destacar muchas palabras, sino en resaltar las correctas. Elegir las palabras equivocadas para enfatizar puede llevar a confusiones y a una pérdida de interés por parte de los oyentes. Incluso un mensaje bien elaborado puede perder impacto si el énfasis no es apropiado.
Existen varios medios para lograr el énfasis, y estos pueden combinarse según la situación:
El tipo de información y las circunstancias determinarán qué medio es el más efectivo.
Decidir qué destacar
Para que el énfasis sea efectivo, es necesario comprender claramente la información que se quiere transmitir. Un orador bien preparado sabe qué puntos desea destacar y cómo hacerlo de manera natural.
Posibles dificultades
Muchas personas se expresan sin problemas en su vida diaria, pero cuando deben leer o presentar un texto escrito, pueden encontrar difícil decidir qué palabras enfatizar. El truco está en estudiar y comprender bien la información antes de presentarla.
Algunos oradores emplean un «énfasis periódico», destacando palabras a intervalos regulares sin pensar en si realmente tienen sentido. Otros dan demasiada importancia a palabras que no aportan valor al mensaje, como preposiciones o conjunciones. Un énfasis mal empleado puede volverse una distracción para el público.
Cómo mejorar
Para mejorar el uso del énfasis, es útil pedir a alguien con experiencia que escuche mientras lees o hablas y te dé retroalimentación. También puedes practicar leyendo artículos o presentaciones, destacando las palabras clave y los puntos importantes.
A medida que avances, analiza el contexto general del texto. Pregúntate:
Evita destacar demasiadas palabras, ya que esto puede diluir el impacto del mensaje.
Cómo usar el énfasis en discursos o presentaciones
Cuando hables o leas en público, es importante resaltar las ideas principales para que el público pueda seguir el flujo del razonamiento. También es útil variar la intensidad y la forma en que se comunica el énfasis, dependiendo del contenido y del público.
Cómo lograrlo
Ejercicio de práctica
Escoge un texto que utilices frecuentemente en tus presentaciones o trabajo y determina qué puntos deseas enfatizar. Luego, lee el texto en voz alta y enfatiza las palabras o frases que apoyan tu argumento. Pide a un colega o amigo que te escuche y te sugiera cómo mejorar tu uso del énfasis.