Copy of Lección 20: Introducción Eficaz a Fuentes o Datos Clave

¿Qué implica?

Preparar mentalmente a tus oyentes antes de presentar un dato relevante, informe o estudio clave.

¿Por qué es importante?

Una introducción eficaz ayuda a tu audiencia a comprender el valor y la relevancia de la información presentada, captando su interés desde el inicio.

La importancia de una buena introducción a datos clave

En cualquier presentación profesional, académica o empresarial, los datos, estudios o informes que respaldan tus ideas constituyen el fundamento de tus argumentos. El impacto que estos datos generen en la audiencia dependerá, en gran medida, de la forma en que los introduzcas.

No es suficiente mencionar un dato o estudio relevante; es importante preparar a los oyentes, despertando su interés y destacando la razón por la cual les presentarás la información. Hay varias maneras de lograr esto de manera efectiva:

Formular una pregunta

Este método es uno de los más efectivos, siempre que la pregunta invite a la reflexión. En lugar de simplemente ofrecer la información, plantea una cuestión que despierte la curiosidad de la audiencia. Este enfoque ayuda a que tus oyentes estén más receptivos cuando presentes los datos.

Por ejemplo, en una presentación sobre sostenibilidad en la empresa, podrías preguntar: “¿Sabían que el 73% de los consumidores prefieren comprar productos de empresas que implementan prácticas sostenibles? Permítanme mostrarles el informe que respalda este dato”.

En el contexto académico, al hablar sobre un estudio reciente sobre inteligencia artificial, podrías preguntar: “¿Cómo creen que la inteligencia artificial afectará el mercado laboral en los próximos cinco años? Este estudio revela un panorama interesante que responderá esta pregunta”.

Al formular una pregunta intrigante, logras captar la atención y preparas el terreno para que el dato o informe tenga un mayor impacto.

Plantear un problema

Otra opción es introducir la información planteando un problema relevante y luego presentar los datos como parte de la solución. Este enfoque es útil cuando tratas temas complejos o cuando deseas destacar cómo la información puede resolver una cuestión crítica.

Por ejemplo, en una reunión sobre eficiencia energética, podrías decir: “Muchas empresas enfrentan dificultades para reducir su consumo energético sin sacrificar productividad. Sin embargo, este estudio demuestra que es posible lograr una reducción del 20% utilizando estas tecnologías innovadoras”.

Este tipo de introducción no solo capta la atención, sino que también proporciona un marco para que los oyentes comprendan la relevancia de la información presentada.

Referencia a la autoridad de la fuente

Si el dato o informe proviene de una fuente de gran credibilidad, como una institución académica o una consultora de prestigio, es útil resaltar la autoridad de la fuente. Esto puede aumentar la confianza de tu audiencia en la información que presentas.

Por ejemplo, podrías decir: “Veamos lo que indica el estudio más reciente de McKinsey sobre las tendencias del consumidor en la era digital”. Al mencionar una fuente respetada, haces que tus oyentes se den cuenta de la importancia y relevancia de la información.

Tener en cuenta el contexto

Cuando presentes un estudio o dato, considera el contexto en el que fue elaborado. Esto puede ayudar a que la audiencia comprenda mejor su relevancia y a que se mantenga enfocada en el mensaje. Por ejemplo, si estás presentando estadísticas sobre la evolución de un mercado específico, destaca las condiciones económicas o tecnológicas que estaban vigentes al momento de realizarse el estudio.

Por ejemplo, si hablas de un estudio de adopción tecnológica, puedes decir: “En este estudio realizado justo antes de la pandemia, se identificaron tendencias que ahora, tras este evento global, son más relevantes que nunca”. Esta estrategia sitúa el dato en un contexto que lo hace aún más comprensible y pertinente.

Incluir detalles históricos o complementarios

Cuando presentes un informe o dato, puede ser útil proporcionar algunos detalles históricos o adicionales que refuercen el valor de la información. Estos detalles no deben ser tan extensos que opaquen el mensaje principal, pero deben servir para enriquecer la comprensión del dato.

Por ejemplo, si hablas de un informe sobre responsabilidad social corporativa, podrías decir: “Este informe fue desarrollado tras analizar las prácticas de más de 500 empresas de distintos sectores a nivel mundial, lo que le otorga una visión amplia y representativa de las mejores prácticas actuales”.

Observa a oradores experimentados

Para mejorar la forma en que introduces datos o informes, presta atención a cómo los expertos en tu campo presentan su información. Analiza cómo logran captar la atención de su público y aplicar los principios que más te hayan impactado.

Cuando prepares tus presentaciones, selecciona cuidadosamente los estudios y datos clave que respalden tu mensaje. Piensa en cómo introducir cada uno de ellos de manera que capten la atención y resalten su relevancia. Cuanto más planifiques este aspecto, más impactante será tu presentación.

Cómo lograrlo

1. Despierta el interés: Formula preguntas que inviten a la reflexión o plantea problemas que el informe o dato puede resolver.
2. Subraya la importancia del dato: Explica claramente por qué el estudio o informe es crucial para el tema que estás discutiendo.
3. Proporciona contexto: Asegúrate de que tu audiencia comprenda el entorno en el que se desarrolló el estudio o informe, lo que ayudará a que lo valoren mejor.

Ejercicio práctico:

1. Selecciona un informe relevante: Identifica un estudio o dato clave que consideres importante para tu próxima presentación.
2. Prepara una introducción eficaz: Piensa en una pregunta o problema que puedas plantear antes de presentar el dato, y reflexiona sobre cómo destacarás su importancia.